14:00
2,5 horas
Karlsplatz Freiburg en el puente peatonal "Karlssteg"
Participación a partir de los 18 años
No hay opción sin alcohol
Excursión panorámica guiada de 2,5 horas por el Schlossberg de Friburgo, con vistas a la cuenca del Rin y al Kaiserstuhl.
5 vinos de una bodega regional de Kaiserstuhl, cerca de Friburgo
Precio de las entradas para el Schlossbergbahn
Copa de vino para llevar de recuerdo
Cancelación y cambio de reserva gratuitos hasta 24 horas antes de la hora de inicio reservada
• Descubre los viñedos centenarios de Lavaux, Patrimonio Mundial de la UNESCO, con sus terrazas escalonadas que ofrecen vistas espectaculares del lago Lemán
• Degusta los prestigiosos vinos Chasselas y Pinot Noir directamente de las bodegas familiares que han perfeccionado sus técnicas durante generaciones
• Explora el encantador pueblo medieval de Murten mientras disfrutas de maridajes exclusivos con productos locales como quesos artesanales
• Visita las cavas subterráneas históricas donde se conservan añadas excepcionales en condiciones óptimas de temperatura y humedad
• Aprende sobre el proceso de vinificación tradicional suizo de la mano de enólogos expertos que comparten sus conocimientos ancestrales
La Ruta del vino por Friburgo con degustación representa una experiencia sensorial única que combina la tradición vitivinícola suiza con paisajes de ensueño. Esta región, conocida por sus viñedos en terrazas que descienden hacia el lago Lemán, ofrece a los visitantes la oportunidad de sumergirse en siglos de historia vinícola. Los tours especializados por Friburgo incluyen visitas a bodegas familiares donde se producen algunos de los vinos blancos más refinados de Suiza, especialmente el emblemático Chasselas. Durante el recorrido, los participantes pueden explorar viñedos que datan del siglo XII, mientras los viticultores locales comparten anécdotas fascinantes sobre la evolución de sus técnicas de cultivo. La experiencia se enriquece con catas guiadas donde se aprende a identificar las notas características de cada variedad, desde los afrutados vinos blancos hasta los complejos tintos de la región. Esta ruta vinícola con degustación en Friburgo también permite descubrir pequeños pueblos pintorescos donde el tiempo parece haberse detenido, ofreciendo una inmersión completa en la cultura local.
Los tours enológicos por los viñedos de Friburgo trascienden la simple degustación para convertirse en verdaderas experiencias gastronómicas. La Ruta del vino por Friburgo con degustación incluye paradas estratégicas en restaurantes tradicionales ubicados entre viñedos, donde los chefs locales crean menús especialmente diseñados para realzar las características de cada vino. Los maridajes típicos combinan especialidades regionales como la fondue de queso Gruyère con vinos blancos secos, o el delicado pescado del lago con Chasselas joven. Las bodegas participantes en esta ruta ofrecen experiencias de cata profesional en salas especialmente acondicionadas, donde los visitantes aprenden sobre las características del terroir único de Friburgo. Muchos establecimientos organizan eventos temáticos que incluyen vendimias participativas durante el otoño, permitiendo a los turistas experimentar de primera mano el proceso de recolección de uvas. La degustación de vinos en la ruta de Friburgo se complementa con visitas a queserías artesanales y chocolaterías, creando una experiencia multisensorial que celebra lo mejor de la gastronomía suiza.
Organizar una visita a la Ruta del vino por Friburgo con degustación requiere considerar varios aspectos para maximizar la experiencia. La mejor época para realizar este tour enológico es entre mayo y octubre, cuando los viñedos están en su máximo esplendor y las condiciones climáticas son ideales para recorrer las terrazas. Los itinerarios típicos incluyen entre tres y cinco bodegas, permitiendo una exploración profunda sin saturar el paladar. Muchos tours incorporan transporte especializado entre viñedos, garantizando la seguridad y comodidad de los participantes. Las rutas vinícolas con cata en Friburgo suelen durar entre medio día y jornada completa, dependiendo del número de paradas y actividades incluidas. Es recomendable llevar calzado cómodo para caminar por los viñedos y una cámara para capturar los impresionantes paisajes. Los guías especializados enriquecen la experiencia compartiendo conocimientos sobre viticultura, historia local y tradiciones vinícolas, convirtiendo cada parada en una lección cultural memorable que va más allá de la simple degustación de vinos.